Espaço

Ya está ahí el fin de semana. Como un trabajador cualquiera, espero impaciente a que llegue la hora de salir de aquí (Digital Azul) y empezar dos días de relativo descanso. Algunos de los españoles aquí presentes, nos estamos dando cuenta de que todavía quedan muchas cosas por ver y el tiempo escasea, así que tenemos la intención de planificar salidas en los próximos fines de semana.

Ayer tuve la evaluación de las primeras semanas de prácticas. Sólo acudimos Leticia y yo, porque Miguel Ángel ya está en Barcelona, Álvaro estaba volviendo y María tenía "trabajo". Nuestra responsable Marta, de la que encontraréis excelentes referencias en el blog de Álvaro, nos preguntó sobre el trabajo que realizamos y el ambiente que hay en nuestros destinos laborales. Las respuestas no pudieron ser más opuestas. Mientras Leticia se quejó de lo poco que la tienen en cuenta y el poco caso que le hacen, sintiéndose en más de una ocasión como un auténtico florero de cerámica portugués, ya hablé maravillas de Digital Azul. Me explayé comentando lo bien que me tratan y lo integrado que estoy en el ambiente de trabajo.

Hoy es viernes y por aquí andamos todos relajados. He escrito un texto que van a colgar en la web sobre la participación de la empresa en un festival que organiza Alkantara, la empresa de María. Ella y yo fuimos los enlaces, pero no nos hemos llevado comisión.

Y hablando del lugar dónde trabaja María, anoche estuvimos de visita en el Espaço Alkantara. Un edificio de tres pisos, aún por rehabilitar, pero con mucho espacio para realizar actos. Ayer, presentaban un reportaje sobre la prostitución en Lisboa. Yo acudí por la relación con el periodismo, pero salimos de allí sin haber entendido nada. No porque la locutora alternase inglés, francés, italiano y portugués a su antojo, sino porque el vídeo no tenía sentido alguno. Yo que pensaba que sería estilo callejeros... Lo bueno es que habían unos platitos con cerezas frescas y además servían vino.

Justo antes de eso conocimos a Íñigo. 22 años de un vasco de no español, según él, de toda cepa. Es simpático y estuvimos con ellos hasta que nos separamos porque se fueron a ver a una amiga de Íñigo que estaba en una fiesta, Álvaro tenía cosillas que hacer y yo me piré a descansar para hoy poder levantarme. Pero esta mañana me ha costado más que nunca despertar y en en el trabajo me estaba durmiendo.

Ahora estoy de charla con Pedro, debatiendo sobre el futuro del periodismo. Yo le cuento mis ideas del doctorado y él me da su opinión que además me está sirviendo mucho porque me enseña sitios de internet que no conocía y me pueden servir para próximas investigaciones.

Ah! No os conté que el domingo pasado nos encontramos a Josep Piqué con su nueva mujer, la directora de informativos de Antena 3, en un mirador de Lisboa. Podría haber vendido alguna instántanea al Hola y similares, pero la cámara se quedó guardada tratando de evitar cualquier tentación ética.